Páginas

lunes, 12 de junio de 2023

LA FRUSTRACIÓN EN EL TDAH

 



La  frustración es la vivencia  emocional de cada persona, ante  un deseo, una necesidad o una expectativa, que no se cumple.

Los niñ@s y adolescentes con TDAH, tienen  dificultad para inhibir y regular las emociones, las viven de manera desproporcionada.

Las personas TDAH, tienen una baja tolerancia a la frustración, ya que ante una situación mínima que les frustra,  se asustan, se enfadan, se ponen tristes y enfadados, lloran, gritan , se ponen negativos…

Tienen un déficit de dopamina, y no gestionan bien el tiempo, la espera, la demora... Necesitan consecuencias  inmediatas, gratificaciones  y rechazan su demora, aún cuando recibiesen premios mayores, si esperasen.

La forma en la que se percibe la frustración, es la que va a determinar cómo se siente la persona, cuando se está bloqueado, al querer y no poder alcanzar la meta.

La frustración en el niñ@ se puede enseñar, a controlar y responder más tranquil@ y adecuadamente. Se puede aprender a tolerar retrasos en el deseo de algo y su gratificación, tolerando así mejor la frustración.

 

CONSEJOS PARA APRENDER A CONTROLAR LA FRUSTRACIÓN


  • Marcar objetivos realistas y razonables

  • Dejarle descansar entre tareas, para que no se agobien tanto y se frustren.

  • Alternar tareas complicadas con otras más fáciles.

  • Enseñarle a identificar la frustración y  controlarla, empezando con pequeños pasos y metas pequeñas. Esto le animará a seguir superándose.

  • Fomentar la autonomía del niñ@ en la resolución de conflictos.

  • Enseñarles a pedir ayuda y a esquivar, esa frustración. ¿Cómo podríamos tolerarlo mejor? Buscar juntos alternativas.

  • Aumentar su autoestima, reforzándole en lo que  es bueno. Usar el refuerzo positivo.

  • Valorar el esfuerzo, no sólo el resultado.

  • Ayudar al niño a aceptar que las cosas , a veces , son como son y no pueden cambiarse.

  • Enseñarla a aceptar críticas de los demás, porque nos ayudan a  mejorar.

  • Reforzar su identidad, a aceptarse a sí mismo .Cada persona somos diferentes.

  • Aplicar técnicas de relajación

  • Poner reglas  y límites claros consistentes, por los padres, profesores…Un niño sin límites estará frustrado y descentrado.

  • No ceder ante las rabietas

  • Ser su propio ejemplo


No hay comentarios:

Publicar un comentario